No le tengo miedo a la oscuridad; temo a que nunca se vuelva a encender la luz en mi.
No le tengo miedo al tiempo; le temo a la eternidad que desaparece.
No le tengo miedo a la soledad: temo nunca volver a poder compartir un abrazo.
No le tengo miedo a las lagrimas; pero le temo a no volver a mostrar mis sonrisas.
No le tengo miedo al dolor; le temo a que nunca pueda ser sanado.
No le tengo miedo al vació; le temo a que ese espacio nunca sea llenado.
No le tengo miedo al abismo; temo a que jamas vuelva a pisar tierra firme.
No le tengo miedo a las heridas; temo a que las cicatrices nunca se puedan borrar.
No le tengo miedo a los sueños; temo que los sueños superen a la realidad.
No le tengo miedo a caerme; temo el no poderme levantarme del suelo.
No le tengo miedo a la muerte; le temo a no haber podido aprovechar lo suficiente la oportunidad de vivir.
Y mucho menos le tengo miedo al amor; solo temo que no me amen de la misma manera en que yo lo hago.
"El miedo, es la capacidad del ser humano para darse cuenta que puede se fácilmente manipulado e invadido por aquello que no es capaz de controlar"